En este Artículo, trabajaremos con un caso hipotético que te ayude a identificar y reconocer tus creencias limitantes. Ana es una Contadora que trabaja desde casa. Tiene muchos clientes que le pagan bien y ama lo que hace. Pero quiere expandir su negocio y ser reconocida como una experta en la industria. Le gustaría comenzar un podcast y ya tiene los primeros episodios definidos claramente.
Va a internet y comienza a investigar cómo comenzar un podcast. Abandona la idea del podcast después de una hora de búsqueda, porque su voz interior le recuerda que no es buena con la tecnología. Ana no se da cuenta, pero acaba de aceptar una creencia limitante.
Las creencias limitantes son aquellas que te impiden alcanzar tu máximo potencial en los negocios y en la vida. Estas creencias a menudo están tan arraigadas que lleva tiempo aprender a reconocerlas. Aquí te presento algunas señales de advertencia de que lo que estás pensando podría ser, en realidad, auto sabotaje disfrazado, constituido por tus creencias limitantes. Observa sus características.

Las creencias limitantes son negativas
Las creencias limitantes siempre son negativas. Es esa voz en tu cabeza que te hace una lista de todas las razones por las que no tendrás éxito. Puedes pensar en comentarios negativos como: “¿Quién eres tú para hacer esto? Nadie está interesado en lo que dices. No eres lo suficientemente inteligente para tener éxito. Todos se reirán de ti si intentas hacer esto. Nadie te pondrá atención.”
Puede que no te des cuenta, pero estos pensamientos negativos suelen ser un mecanismo de defensa. Nunca tienes que intentarlo si crees que automáticamente vas a fracasar; si no lo intentas, no te arriesgas a salir lastimado o fracasar. Primero, debes superar esas creencias limitantes.
Las creencias limitantes fomentan una mentalidad de pobreza
A menudo, las creencias limitantes te conducen a una mentalidad de pobreza. Esto va más allá de las finanzas y afecta cómo vives tu vida y manejas tu negocio. Tu voz interior podría decirte cosas como: “El éxito no es para todos. No puedo avanzar en los negocios porque mi plataforma es pequeña. Todos mis competidores están reduciendo los costos, así que no puedo competir con ellos y tener ingresos dignos.”
Este tipo de mentalidad de pobreza te mantiene defendiendo de manera intensa, tus justificaciones para no lograr lo que en realidad te pertenece. Esto no solo te impide hacer crecer tu negocio, sino que también te impide hacerte amigo de otros emprendedores con un espíritu de superación y éxito. Ves a todos como competidores en vez de potenciales socios comerciales o afiliados.
Las creencias limitantes te presentan como una víctima
Las creencias limitantes te hacen pensar que eres una víctima. Por ejemplo, podrías pensar cosas como: “El éxito no está en mis genes. Estoy destinado a ser un perdedor. No importa cuánto trabaje, todavía no podré tener éxito.”
El problema con estos pensamientos es que pueden convencerte de que realmente eres impotente. Como resultado, no desafías tus creencias limitantes. Te quedas atrapado en el mismo lugar durante meses o incluso años, sin darte cuenta de que el verdadero problema era tu mentalidad. Cuidado!
Reconocer las creencias limitantes lleva tiempo. Cuando te encuentres enfocado en una creencia limitante, intenta contrarrestarla con una verdad positiva. Sigue haciéndolo y pronto notarás un cambio en tu mentalidad que te llevará a tener un negocio más sólido y una vida mejor.
Registra y controla tus pensamientos.
- ¿Cuáles son algunas formas en las que mantienes una mentalidad de pobreza?
- ¿Cuáles son algunas creencias limitantes que te hacen sentir como una víctima impotente?
- Los pensamientos negativos suelen ser un mecanismo de defensa. ¿De qué crees que estás tratando de protegerte?
